Unas cinco personas murieron y otras 16 resultaron heridas tras ser baleados en Chicago, EE. UU. por un hombre armado que comenzó a disparar, diez minutos después comenzar el desfile por el 4 de julio, en la conmemoración del Día de la Independencia estadounidense.
Medios locales de Chicago reseñaron que el desfile arrancó cerca de las 10H00 local (15H00 UTC), pero se detuvo repentinamente cuando se escucharon los disparos, según los testimonios.
Cientos de participantes, algunos heridos y ensangrentados, corrieron de la ruta del desfile, dejando objetos y sillas a su paso. Se desconoce si el tirador continúa libre.
La alcaldesa de la ciudad, Lori Lightfoot, dijo que el Departamento de Policía estaba brindando asistencia en los sucesos de Highland Park y manifestó su aflicción con las familias de los fallecidos y heridos.
“La tragedia que se desarrolla en Highland Park es devastadora. Estuve en contacto con el alcalde Rotering y le ofrecí nuestro apoyo, y el Departamento de Policía de Chicago está brindando asistencia», declaró en Twitter.
«Nos afligimos con las familias de los fallecidos y heridos, así como con toda la comunidad de Highland Park. La policía está trabajando arduamente para detener al tirador. Si alguien tiene información, lo alentamos a que llame al 911 y reporte lo que sabe”, agregó.
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Los medios presumen que al menos tres cuerpos estaban cubiertos en el lugar y videos difundidos por los periodistas muestran que, tras los disparos, una banda va en una carroza que continúa tocando mientras la gente pasa corriendo y gritando.
La Oficina del sheriff del Condado de Lake aseguró en su cuenta en Twitter que está prestando ayuda a la Policía de Highland Park “con un tiroteo en el área de la ruta del desfile del Día de la Independencia”.
Líderes citadinos apuntaron en Twitter que la Policía está respondiendo a un incidente en el centro de Highland Park. “El Fourth Fest ha sido cancelado. Evite el centro de Highland Park. Se compartirá más información a medida que esté disponible”, agregó.
Por su parte, el gobernador del estado de Illinois, donde se encuentra Chicago, comentó que estaba monitoreando de cerca la situación. “La policía estatal está en el lugar y hemos puesto todos los recursos estatales a disposición de la comunidad. Continuaremos trabajando con los funcionarios locales para ayudar a los afectados”, subrayó.
Tomado de: teleSUR