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Sandino: la Responsabilidad de ser Libres, el Deber de ser Soberanos

Sandino

«Hay Patria, Hay Paz, Hay Dignidad, y hay hijos e hijas de Sandino que amamos a nuestra Nicaragua, y por eso es Libre: Porque amamos a Nicaragua y vivimos en Amor a Nicaragua! […] Vamos a estar el día martes celebrando en la Avenida De Bolívar a Chávez un Acto Hermoso y un Acto Grande, encontrándonos alrededor de ese Patrimonio y ese Legado, que es la responsabilidad de ser Libres, el Deber de ser Soberanos»

Cra. Rosario Murillo, 17 de febrero de 2023

A 89 años del asesinato del General de Hombres y Mujeres Libres, Augusto C. Sandino, recordamos los principales hitos de su vida: su nacimiento en Niquinohomo, sus viajes por Centroamérica y México, su involucramiento en la guerra constitucionalista, el rechazo al pacto del Espino Negro y el inicio de la guerra de liberación y defensa de la soberanía de Nicaragua, los acuerdos de paz, la fundación de la cooperativa en el Río Coco, la traición y su martirio en 1934. Una vida ejemplar, que ha iluminado las luchas libertarias de Nicaragua y Nuestramérica.

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El Equipo de Barricada/Historia comparte con sus lectores la biografía del General Sandino.

El muchacho de Niquinohomo

Nació el 18 de mayo de 1895, en el pueblo de Niquinohomo, en el departamento de Masaya.  Fue inscrito el 14 de julio de 1895, como Augusto Nicolás Calderón Sandino, hijo natural de Margarita Calderón Ruíz y Gregorio Sandino López.

El encuentro con su padre

En 1907, con doce años edad marcados por la pobreza y las privaciones, el pequeño Augusto Nicolás se encontró con su padre en una calle del pueblo y, años después, él mismo narró el diálogo que tuvo lugar entre ambos: “Le interpelé llorando pero enérgicamente: óigame señor, ¿soy su hijo o no? y mi padre contestó: sí hijo, yo soy tu padre. Yo le repliqué: ¿por qué no me trata Ud. como trata a Sócrates? Me levantó hasta su pecho, me besó y me abrazó fuerte y largo. Y me llevó a su casa.”   En esos años empezó a utilizar el nombre de Augusto C. Sandino.

Muerte de Benjamín Zeledón

El 4 de octubre de 1912, durante la primera intervención yanqui, Sandino fue testigo del último combate del general Zeledón: “Era yo un muchacho de 17 años y presencié el destace de nicaragüenses en Masaya y otros lugares de la República, por las fuerzas filibusteras norteamericanas. Personalmente miré el cadáver de Benjamín Zeledón, quien fue sepultado en Catarina, pueblo vecino al mío. La muerte de Zeledón me dio la clave de nuestra situación nacional frente al filibusterismo norteamericano; por esa razón, la guerra en que hemos estado empeñados, la consideramos una continuación de aquella”.  

Un joven emprendedor

En 1915, a la edad de 20 años, Sandino dejó la casa de su padre para buscar la manera de hacer su vida por sí mismo.  Recorre haciendas y plantaciones trabajando como ayudante de mecánica, volviendo más tarde a Niquinohomo para dedicarse al comercio de granos.

En Tamaulipas y Veracruz

Sandino salió hacia Honduras, empleándose en La Ceiba como guardalmacén del Ingenio Montecristo, propiedad de la Honduras Sugar and Distilling Company.  En el año 1923, dejó Honduras y llegó a Guatemala, donde trabajó en las plantaciones de la United Fruit Company en Quiriguá. Ese mismo año siguió su viaje hacia México, donde comenzó a trabajar en Tampico para la South Pennsylvania Oil Company. En 1925, pasó al campamento de la Huasteca Petroleum Company, en Cerro Azul, estado de Veracruz, donde permaneció hasta su regreso a Nicaragua, en mayo de 1926.  En México, Sandino se vinculó con líderes sindicales, obreros, militantes socialistas, anarquistas y masones.

Retorno a Nicaragua

A su regreso a Nicaragua, llegó a la ciudad de León en el mes de junio de 1926 y se unió a un grupo de obreros, para ir a trabajar a las minas de oro de San Albino, en el departamento de Nueva Segovia.  Empezó a laborar como empleado administrativo y comenzó a promover en sus compañeros de labores sus ideas patrióticas libertarias: “…en vista de los abusos de Norteamérica en Nicaragua, partí de Tampico, México, el 18 de mayo de 1926 -en donde me encontraba prestando mis servicios materiales a la compañía yanqui- para ingresar al Ejército Constitucionalista de Nicaragua, que combatía contra el régimen impuesto por los banqueros yanquis en nuestra república”.

Levantamiento en las Minas de San Albino

26 de Octubre, 1926. Al estallar la guerra constitucionalista, utilizó sus ahorros (traídos de México) para comprar algunas armas en la frontera con Honduras y con un grupo de compañeros hicieron explotar la Mina de San Albino. Se incorporó a la lucha en la llamada Guerra Constitucionalista.    En este primer levantamiento, participaron 30 hombres, incluido el General Sandino, que fueron conocidos como “Los Montañeses”.   La primera acción fue el ataque al cuartel conservador en El Jícaro el 2 de noviembre de 1926.   En poco tiempo, organizó un ejército de mil hombres, que logró dominar los departamentos del centro-norte de Nicaragua.

Firma del Pacto del Espino Negro

El 4 de mayo de 1927 se firmó el Pacto del Espino Negro en el poblado de Tipitapa. Los firmantes fueron José María Moncada, General en Jefe del Ejército Liberal Constitucionalista y Henry L. Stimson, representante personal del Presidente John Calvin Coolidge.    Acordaron una paz general e inmediata, el desarme de ambas partes, la creación de la  Guardia Nacional  y la Supervisión de las elecciones por parte de los marines norteamericanos.

Cómo nació el Día de la Dignidad Nacional

Sandino fue el único de los generales que rechazó la imposición yanqui y decidió continuar la lucha hasta expulsar a los marines, teniendo que enfrentarse a traidores e invasores, en una larga lucha de liberación nacional.  “Ya en el teatro de los acontecimientos me encontré con que los dirigentes políticos, conservadores y liberales son una bola de canallas, cobardes y traidores, incapaces de poder dirigir a un pueblo patriota y valeroso.”  Este día fue proclamada por el General Sandino como el Día de la Dignidad Nacional, porque Nicaragua tenía y tiene hijos que la aman.

Inicio de la guerra de liberación nacional

El 12 de mayo de 1927, contando solamente con veintinueve hombres y 40 rifles, el General Augusto Nicolás Calderón Sandino, inició la guerra de liberación nacional contra el invasor yanqui y los gobiernos entreguistas de Adolfo Díaz y José María Moncada.

Matrimonio con Blanca Aráuz

El mismo día que el General Sandino cumplía 32 años de edad, el 18 de mayo de 1927, contrajo matrimonio en la iglesia de San Rafael del Norte con Blanca Stella Aráuz Pineda, nacida el 25 de mayo de 1909.

San Albino, el primer manifiesto político

El General Sandino dio a conocer su primer manifiesto político desde el Mineral de San Albino, Nueva Segovia, el primero de julio de 1927.   El primer párrafo del Manifiesto de San Albino, se caracteriza por su contundencia: “El hombre que de su patria no exige un palmo de tierra para su sepultura, merece ser oído, y no sólo ser oído sino también creído. Soy nicaragüense y me siento orgulloso de que en mis venas circule, más que cualquiera, la sangre india americana, que por atavismo encierra el misterio de ser patriota leal de mis actos en las cuestiones de Nicaragua y, por ende, de la América Central y del todo el Continente de nuestra habla”.

Fundación del Ejercito Defensor de la Soberanía Nacional de Nicaragua

Con apenas 30 hombres, el 2 de septiembre de 1927, Sandino comenzó una guerra nacional contra los invasores estadounidenses y el gobierno entreguista de José María Moncada.   Sandino, a través de un manifiesto, afirmó que ya no se trataba de una guerra civil, sino una lucha entre patriotas e invasores.  En el período de 1927 a 1932, Sandino y el Ejército Defensor de la Soberanía Nacional de Nicaragua libraron más de 500 combates.

En México en busca de apoyo político

Sandino emprendió un viaje a México con el fin de obtener el apoyo del gobierno mexicano y, al mismo tiempo, fortalecer la colaboración con el comité de solidaridad Manos Fuera de Nicaragua (MAFUENIC).  Este viaje (1929-1930) hizo de Sandino una figura política de dimensión continental.

Firma de los Acuerdos de Paz

Luego de casi 7 años de lucha armada del Ejército Defensor de la Soberanía Nacional de Nicaragua (EDSSN) contra las tropas invasoras yanquis y la Guardia Nacional, El General Augusto C. Sandino  y el presidente Juan Bautista Sacasa, el 2 de febrero de 1933,  firmaron el Convenio de Paz que puso fin al conflicto bélico. Los acuerdos fueron incumplidos por el gobierno y la nefasta Guardia Nacional, comandada por Anastasio Somoza García.

La Fundación de “Central de Cooperativas del Rio Coco Güigüilí”

El 19 de febrero de 1934, General Augusto C. Sandino fundó en el municipio de Wiwilí, en las riberas del río Coco, cooperativas agrícolas integradas por los campesinos desmovilizados del EDSSN, para que «fundieran sus espadas en arados». Con el desarrollo de este modelo de cooperativas, Sandino daba inicio al proyecto de integración nacional, que culminaría, más de cincuenta años después, con el triunfo de la Revolución Popular Sandinista y que sigue vigente hasta nuestros días.

Asesinato del General Augusto C. Sandino

El 16 de febrero de 1934, el General Sandino viajó a Managua para realizar gestiones a favor de la paz.  La Guardia Nacional, siguiendo las indicaciones de Somoza García, acordó su muerte en una reunión realizada a las 7 de la noche del 21 de febrero, orden que fue ejecutada tres horas más tarde.   La distinguida poetisa peruana Rosa Zoyla Cárdenas, recitaba poemas de Rubén Darío en el Galerón de los Cañones en el Campo Marte, mientras Somoza, en primera fila, esperaba ansioso el sonido de los disparos y la confirmación de la muerte del Héroe de Las Segovias.   

El General y sus dos mejores lugartenientes, Francisco Estrada y Juan Pablo Umanzor, al salir de una cena con el presidente Juan Bautista Sacasa, fueron secuestrados y asesinados a traición por la Guardia Nacional. La orden fue dada por el Jefe Director de la GN, Anastasio Somoza García, quien respondía a los intereses del gobierno norteamericano. Esa noche, su hermano Sócrates Sandino corrió la misma suerte, acribillado a balazos con Rolando Murillo, yerno del ministro Salvatierra y un niño de diez años, que en ese momento cruzaba la calle. Sólo el Coronel Santos López, defendiéndose con una ametralladora de mano, logró escapar herido y salvarse de la masacre.

Su gesta y voluntad de lucha, fue continuada por el Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN), hasta el triunfo del 19 de julio de 1979.

“Augusto César Sandino es el héroe guerrillero nicaragüense

cuyo nombre ha pasado a ser el símbolo

de la ya secular lucha de los pueblos de América Latina

contra el imperialismo yanqui”.

Comandante Carlos Fonseca