Tras su paso por el noroeste de México, la tormenta tropical Hilary llegó el domingo al estado de California donde las autoridades alertaron de severas inundaciones en el suroeste de Estados Unidos.
Según el Centro Nacional de Huracanes (NHC por sus siglas en inglés) el núcleo de la tormenta se encontraba en California con vientos de 95 kilómetros por hora tras haber atravesado la península mexicana de Baja California.
En su último boletín el NHC advirtió de fuertes inundaciones sobre Baja California y partes del suroeste del país hasta este lunes.
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Ante la peligrosidad de las intensas lluvias que provocaría la tormenta Hilary, el gobernador de California, Gavin Newsom, declaró el estado de emergencia en gran parte de la zona sur del estado.
«Se trata de un fenómeno meteorológico sin precedentes», advirtió la alcaldesa de la ciudad de Los Ángeles, Karen Bass.
Las autoridades locales ordenaron el cierre de las playas y emitieron avisos de inundaciones repentinas e incluso de tornados a causa de Hilary.
La Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA, por su sigla en inglés), informó que el fenómeno climático va a tener un impacto serio y amenaza para el sur de California, por lo que llamó a la población a tomar en serio a la tormenta y escuchar a las autoridades locales.
Las autoridades de California abrieron cinco refugios contra tormentas y desplegaron más de 7.500 efectivos, incluidos varios centenares de soldados de la Guardia Nacional, así como equipos de rescate en aguas rápidas.
A su paso por México, las lluvias provocadas por Hilary dejaron un muerto y daños en infraestructura en la zona sur de la península de Baja California.
El sábado pasado, Hilary pasó de ser un huracán categoría 4 a 1. Pese a ello, provocó fuertes lluvias en la península de Baja California y en gran parte de México, incluida Ciudad de México, con calles anegadas y caída de árboles.
Tomado de: TeleSUR