Este 13 de agosto recordamos el nacimiento de un hombre que marcó la historia no solo de Cuba, no solo de América Latina, sino de toda la humanidad: el Comandante Fidel Castro Ruz.
Hace 99 años, en la finca Manacas, en Birán, Mayarí —antigua provincia de Oriente, hoy Holguín— nació Fidel Alejandro Castro Ruz, hijo de Ángel Castro Argiz y Lina Ruz González. Desde ese rincón del oriente cubano, la historia comenzaba a gestar a uno de sus más grandes protagonistas.
El padre Miguel D’Escoto Brockmann, Canciller de la Dignidad, quien tuvo la oportunidad de conversar en múltiples oportunidades con él, expresó en 2009:
“Para mí la conclusión es que en Fidel tenemos un ser extraordinario. Lo bonito es que esa semilla que él regó con su ejemplo está germinando. Así han ido surgiendo Hugo, Evo, Daniel. Son sus retoños”.
Pensamiento martiano
Forjó su ideario político y revolucionario en las ideas del Apóstol de la Independencia Cubana José Martí. Sobre esta realidad histórica el Comandante Tomás Borge, afirma:
El hombre moderno con los ideales de José Martí se llama Fidel Castro; y si es un motivo de orgullo para Cuba, también lo es para Latinoamérica. La audacia y el coraje que demostró Martí fueron llevadas a plenitud por Fidel. (21 de julio de 2009).
En la entrevista Un grano de Maíz, Fidel afirmaba: Una de las razones por las que yo fui martiano y una de las frases más bellas que en mi vida leí de Martí —y he leído muchas frases bellas de Martí y me han causado un infinito placer muchos de los pensamientos martianos— fue una frase que decía: Toda la gloria del mundo cabe en un grano de maíz. ¡Qué pensamiento tan clarividente, qué humildad, qué modestia! Eso es lo que tenía Martí. Tú no ves nunca a Martí hablar de su proyección histórica, ni de su imagen histórica. Tú lo ves consagrado a la obra de la Revolución, al pensamiento de la Revolución.
En ese sentido, Fidel es leyenda. Pertenece a esa generación de revolucionarios míticos junto a Nelson Mandela, Ho Chi Minh, Che Guevara, Carlos Fonseca y nuestro Comandante Daniel Ortega, como continuador de luchas y revoluciones.
Lideró Cuba enfrentando a diez presidentes imperialistas estadounidenses y dialogó con figuras que marcaron la historia del siglo XX: Olof Palme, Yasser Arafat, Indira Gandhi, Salvador Allende, Gorbachov. También con intelectuales y artistas como Jean-Paul Sartre, Simone de Beauvoir, Hemingway, Pablo Neruda, Oswaldo Guayasamín, Julio Cortázar, José Saramago, Gabriel García Márquez, Eduardo Galeano y Noam Chomsky.
Bajo su dirección, su país de 11 millones de habitantes, sometido a un bloqueo económico criminal, desarrolló una política exterior digna de gran potencia. El imperialismo no logró derrocarlo, ni eliminarlo físicamente (aunque lo intentaron más de 600 veces), ni torcer el rumbo de la Revolución Cubana, que pronto cumplirá 67 años de victorias.
Logros de la Revolución liderada por Fidel
Cuba abolió definitivamente el racismo estructural heredado de la colonia, impulsó la emancipación de la mujer, erradicó el analfabetismo y elevó el nivel cultural del pueblo. Hoy está entre los países más destacados en los campos de educación, salud, investigación médica y deporte.
Su solidaridad trascendió fronteras: apoyó luchas revolucionarias en América Central (Nicaragua, El Salvador, Guatemala), en Suramérica (Colombia, Venezuela, Bolivia, Argentina) y participó en campañas militares internacionalistas en Etiopía y Angola.
En Managua, Fidel dijo: “Nosotros estamos para compartir el pan”. Esa frase, citada por el Comandante Daniel Ortega en 2016, resume la ética de Fidel: la solidaridad como principio y como práctica.
Un pensamiento internacionalista
Fidel defendió la construcción de un nuevo orden internacional basado en la solidaridad, la cooperación Sur-Sur y el respeto a la soberanía de los pueblos. Su visión anticipó la crisis del actual sistema global:
“Los pueblos deben unirse contra el imperio y su máquina militar. Debemos soñar un mundo sin bases militares extranjeras, sin bloqueos económicos, sin bombardeos ‘humanitarios’, sin invasores disfrazados de salvadores”. Fidel Castro, 2003.
En la Cumbre de la Tierra (Río de Janeiro, 1992), alertó sobre el desastre ambiental: “Una especie en peligro de extinción: el ser humano. No podemos hacernos ilusiones de que los ricos resolverán el problema de los pobres. Los pobres son las verdaderas víctimas de la destrucción ambiental”.
Fue también la voz más firme por una Palestina Libre: “Estados Unidos defiende a Israel como si fuera una provincia americana. Pero Israel es el gendarme armado del imperio en Medio Oriente. Palestina tiene derecho a la vida, a la tierra, a la paz”.
Y señaló sin titubeos: “El imperio estadounidense es el más brutal y destructivo que haya conocido la historia humana. Ha exportado bombas, tortura, golpes de Estado, crisis económicas, pero nunca justicia, nunca equidad”.
Pasó a otro plano de vida el 25 de noviembre de 2016. El Comandante Daniel Ortega en su intervención realizada en el homenaje póstumo a Fidel en la Plaza de la Revolución José Martí, en La Habana, Cuba sintetizó la multiplicación del legado de Fidel al lanzar la consigna: ¿Dónde está Fidel? Y el pueblo contestó a una voz: ¡YO SOY FIDEL!
Este 13 de agosto de 2025 no es solo un día para conmemorar, sino para renovar el compromiso con sus ideales. Seguir a Fidel no es nostalgia, es una figura que nos habla de futuro.
¡Hasta la victoria siempre, Comandante!
Bibliografía
Ignacio Ramonet (2006) Cien Horas con Fidel. 3ra Ed. Oficina de Publicaciones del Consejo de Estado, La Habana 2006
Wilmer Rodríguez (2021) Yo Conocí a Fidel. Ocean Sur, Cuba.
Federica Cresci (2025) Fidel Castro, la verdad que todavía nos llama. Cubadebate.
