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Carlos Arroyo Pineda “Fermín”: Convicción inquebrantable en la Victoria

Escrito por : Carlos Arroyo 17 de octubre de 2025

“La Vida no es sino un Canto a la Lucha, dejó dicho Carlos Arroyo Pineda “Fermín”. También en estos días, junto a Róger Langrand, combatiendo heroicamente hasta el final, no sólo los recordamos, sino que nos inspiran. Su ejemplo es Inspiración, y es el Deber que sentimos en lo profundo de nuestros Corazones, de Luchar para Vencer, con Amor. Con Amor, liberarnos de cualquier forma de Odio. Con Amor y Esperanza. Confianza en nuestro Patrimonio Heroico. (…) Estos son Tiempos complejos, complicados, para seguir luchando. La Vida no es sino un Canto a la Lucha, dijo el Héroe Carlos Arroyo Pineda “Fermín”, oriundo de Matagalpa.”

Compañera Rosario Murillo

Copresidenta de Nicaragua

15 de octubre de 2025

INFANCIA Y JUVENTUD

Carlos Francisco Arroyo Pineda nace el 8 de enero de 1953 en el Hospital San Vicente (actualmente Complejo Judicial del Norte «Dr. Carlos Arroyo Buitrago»), en la ciudad de Matagalpa, hijo de Norma Pineda Zamora y Carlos Arroyo Buitrago. Es el tercero entre sus hermanas y hermanos. Desde su infancia es evidente su “perfil de joven disciplinado, comedido, respetuoso y cariñoso, lo que a su vez infunde esos mismos sentimientos en aquellos que le rodean, tanto en la familia como en su comunidad”, expresa su hermano Álvaro Arroyo. Desarrolla un vínculo directo con otros niños del vecindario, sin distinciones de ningún tipo. Si bien proviene de una familia en condiciones privilegiadas, los principios éticos y morales sobre los que se basó su crianza, junto a su temperamento noble y firme, le forjan una visión del mundo que cuestiona el orden social predominante en su momento histórico, desde una temprana edad.

En una Navidad, se niega a cenar en la mesa con el resto de la familia, porque le parece inaudito que otros niños vivan en la calle y no tengan qué comer. En ocasión de su Primera Comunión, se rehúsa a celebrar el convivio en el “Club Social de Matagalpa”, hasta que permitan entrar a sus invitados, quienes eran niños del vecindario que no provenían de las familias acomodadas matagalpinas. Es decir, su conducta reta las normas impuestas por la sociedad en la que va creciendo, ya que las desigualdades le resultan contradictorias a su sistema de valores. En estas primeras etapas del desarrollo de su personalidad, está la raíz de su identificación con la causa del pueblo en su adolescencia y adultez.

Estudia en el Colegio San Luis y posteriormente en el Instituto Nacional Eliseo Picado, cantera de cuadros sandinistas como el mismo Comandante Carlos Fonseca. Al finalizar la secundaria, se inscribe en la Universidad Nacional Autónoma de Nicaragua en León para estudiar Derecho en 1971. Además de la tradición de dar continuidad a la línea de abogados en la familia paterna, encuentra en el Derecho los instrumentos para profundizar su estudio de la realidad social nacional y los medios para cambiarla y construir una nueva sociedad más justa.

Se integra al Frente Estudiantil Revolucionario, desde donde denuncia los crímenes de la dictadura somocista en contra de los reos políticos y las condiciones infrahumanas en que laboraban los obreros y campesinos del país, además de la situación de injusticia y desigualdad a la que era sometida la población nicaragüense mientras las riquezas de nuestros recursos eran acaparadas en pocas manos oligarcas y otra buena parte entregada en concesiones a las empresas transnacionales capitalistas.

En esta etapa, comienza a ser reconocido por sus habilidades de oratoria, nutridas de las extensas horas de estudio que en su formación revolucionaria. Esa misma formación la dedica a su generación, inculcándoles su tenacidad y su convicción inquebrantable en la victoria del FSLN contra la dictadura. Su liderazgo entre los estudiantes de la UNAN de León y la coherencia entre sus acciones y sus palabras, le ganan la confianza de sus responsables políticos.

VIAJA A CHILE

En 1972, sus padres lo convencen de estudiar Ciencias Políticas en Chile, país que hervía de transformaciones sociales de la mano de la Unidad Popular de Salvador Allende. Carlos logra ver la realidad de un país donde gobierna el socialismo, lo que fortalece sus convicciones ya arraigadas. Al llegar a Chile, inmediatamente se integra en los Comités de Solidaridad con Nicaragua. Al año siguiente, en 1973, estalla el golpe de estado de Pinochet y los gorilas militares, orquestado por la Central de Inteligencia de Estados Unidos (CIA), asesinan a Allende y persiguen a todo lo que huela a socialismo. Carlos Arroyo se ve forzado a volver a Nicaragua, donde se gana nuevamente a pulso su lugar en la estructura orgánica del FER y como militante del FSLN. Su hermano Álvaro Arroyo expresa sobre su convicción en la victoria:

“Lo distingue lo visionario. Nunca puso en duda ni por una milésima el hecho de que la revolución iba a triunfar. De que la lucha nos tendría que conducir a la victoria y muchos de sus compañeros decían “a veces lo vemos como loco”, porque decía cosas que a simple vista parecían irrealizables. Decir en aquel entonces de que la dictadura de Somoza iba a ser derrotada, de que íbamos a obtener la victoria, parecían palabras más de un soñador, pero precisamente su confianza en la victoria radicaba en ese ingrediente visionario que él tenía. Él en un poema se refiere a muchas cosas que ahora se están dando. En la risa de los niños cuando la revolución les abre el espacio y les restablece los derechos ciudadanos a todos los nicaragüenses. Ahí es donde vos ves esa visión, que se sintetiza y concretiza en que todo lo que estamos viviendo él lo miraba, y tenía una fe inquebrantable en ello. Eso lo hizo asumir sus responsabilidades de una forma efectiva, resuelta, que muchas veces lo podemos ver en las acciones que él tomó en determinado momento. La temeridad con que él abordó situaciones de riesgo. A él lo definen como un hombre de mucha fe. La fe total de que la revolución iba a triunfar, de que el FSLN daría al traste con la dictadura”.

Posterior a la toma de la casa de Chema Castillo por el heroico comando “Juan José Quezada” el 27 de diciembre de 1974, se desata nuevamente la cruda represión y persecución de sospechosos señalados de “extremistas” en los pasquines virulentos de Luis H. Pallais Debayle. Carlos Arroyo es citado a consejo de guerra a inicio de 1975, lo que supone el riesgo de ser apresado con cualquier cargo ficticio por parte de la dictadura somocista. Sin embargo, es autorizado por el FSLN para presentarse y es acompañado por el rector Mariano Fiallos, lo que demostraba el alto grado de confianza que se había ganado y sus dimensiones como revolucionario.

El 4 de febrero de 1976, es capturado el Comandante Tomás Borge, por lo que sus responsabilidades son asignadas a Carlos Arroyo Pineda, bajo el mando directo de Pedro Aráuz Palacios. Dentro de estas responsabilidades está atender la red de colaboradores y de casas de seguridad para el FSLN. Posteriormente, el Comité Ejecutivo del FER es trasladado a una casa de seguridad en la Colonia Centroamérica. Esta casa es detectada en marzo del ’77 por la Oficina de Seguridad Nacional, órgano de inteligencia del régimen somocista.

En julio de 1976, el FSLN y el FER convocan a una manifestación desde el Auditorio Ruiz Ayestas de la UNAN, donde Carlos Arroyo insta a los estudiantes a “Seguir el ejemplo, seguir el ejemplo de los revolucionarios, como nuestro pueblo continúa y sigue el ejemplo de Sandino”, evocando la gesta heroica de Julio Buitrago y Francisco Moreno, a la vez que habla sobre la injusta prisión en que se encuentran Tomás Borge e Iván Montenegro, entre otros dirigentes sandinistas, desarrollar la “labor de organización, porque esa es la principal labor del Sandinista, la labor de la organización en el seno mismo del pueblo”.

FIRMEZA Y DISCIPLINA

En agosto de 1977, se vuelven cada vez más necesarios los operativos de recuperaciones económicas, ya que la situación de la montaña era dura, y los compañeros requerían con urgencia abastecimiento de alimentos, medicinas, armas, municiones, entre otros pertrechos. La jefatura de la GPP orienta a la compañera Ana Isabel Morales a realizar una acción en el Banco de América, donde trabajaba como cajera. Según su testimonio, les hace el croquis del banco, de cómo podían hacer la entrada, la salida, en qué lugares las ubicaciones y todo. Para la extracción del dinero, está asignado Carlos Arroyo bajo la fachada de un ingeniero que realizaría un retiro de más de 100,000 córdobas en concepto de pago de planilla.

Para pasar desapercibido, dado que ya estaba quemado como militante del FSLN, debe presentarse en el banco sin anteojos. Esto era un problema, ya que tenía una profunda miopía, pero todo estaba calculado de forma tal que él reconocería la sombra de Ana Isabel en la caja, realizarían la transacción, y ambos partirían, Carlos con el dinero y Ana Isabel hacia la clandestinidad. En el momento en que Carlos llega al banco, minutos antes llaman a Ana Isabel y tiene que retirarse brevemente de la caja. Cuando regresa, ve que Carlos después de esperar cronométricamente su presencia, está por salir del banco. En eso lo llama por “¡Ingeniero, aquí dejó sus cosas!”. El regresa, retira los paquetes de dinero, y sale por la puerta principal.

Parte de las responsabilidades asignadas a Carlos Arroyo, “Fermín”, es redactar y pasar comunicados por las radios clandestinas. En este sentido, le orientan formar un grupo para asaltar la Radio Mundial y pasar una cinta con mensajes de conciencia para la población, haciendo un llamado a la lucha, denunciando las torturas a que eran sometidos Tomás Borge y Marcio Jaen en las tenebrosas mazmorras de la OSN y para exigir el cese a su aislamiento. Este operativo toma lugar el 16 de julio de 1977 a las 5:30 de la mañana. Con el croquis de la Radio Mundial realizado por José Arana, Carlos prepara la casa de seguridad para planificar, practicar y consolidar el operativo junto a Margine Gutiérrez, Glauco Robelo, Noel Escobar y Mario Elvir Maldonado.

A pesar de un impase en el que son perseguidos por una patrulla BECAT (Brigada Especial contra Asaltos y Terroristas) que luego logran perder, Carlos mantiene la firme orientación de que la orden del Frente debe ser cumplida a cabalidad. Su disciplina y alta moral infunde al resto del grupo la mística para llevar la tarea cometida hasta el final. Con esto, logran llegar al lugar donde se encontraba la cabina de la Radio Mundial, encierran al personal en un cuarto y le dicen al controlista que conecte el equipo donde reproducen la cinta con el mensaje revolucionario. De inmediato, se retiran del lugar mientras las patrullas se dirigen hacia el edificio. Es la primera vez en la historia del FSLN que un comunicado logra pasar íntegro antes de ser interrumpido con la llegada de la Guardia Nacional. También había retrasado su interrupción un papel que habían puesto en la puerta: “Hemos colocado una bomba y el que entre, se muere”. Esto por supuesto, era un método disuasivo, no se había colocado ningún dispositivo explosivo en la instalación, pero le valió el tiempo para que el pueblo nicaragüense pudiera escuchar completo el comunicado del FSLN en la viva voz de Pedro Aráuz Palacios.

OCTUBRE DE 1977

El domingo 16 de octubre de 1977, Carlos suspende una reunión por las acciones que calientan las calles en esos días, y manda a embuzonarse hasta el día siguiente a toda la célula. Según relato de los habitantes del barrio San Luis, y la reconstrucción que han llevado a cabo compañeros que lucharon junto a “Fermín”, se define que el lunes 17 de octubre Carlos Arroyo junto a Róger Langrand parten de una casa de seguridad en Las Mercedes, Carretera Norte, donde se encontraba también Gloria Campos. Ambos se dirigen a una reunión, donde los espera una célula en Ciudad Jardín, entre ellos José Arana y Nidia Escobar. 

Aproximadamente a la 1:30 de la tarde, de la Tenderí hacia el norte, en la esquina del Instituto Nacional Maestro Gabriel, uno de los guardias que iba montado en un BECAT, conocido como Ramón “Trompudo” reconoce a Róger Langrand, el conductor, pero lo confunde con su hermano, Marcelo Langrand, quien estuvo preso en Honduras. Esto sucede en las inmediaciones de la Acción Cívica y de la Central de Policía, zona caliente de Managua. El BECAT hace parada al vehículo donde vienen Róger y Carlos, y estos inmediatamente toman posición de combate.

Los guardias a bordo del BECAT asesinan a Róger, pero Carlos logra salir del carro, y herido de una pierna se dirige hacia el este sobre la calle del Colegio Maestro Gabriel. Lanza una granada de fragmentación para repeler a la Guardia, ganando tiempo y distancia. Los estudiantes del colegio le dicen que entre, pero este se niega, conociendo la masacre que desataría la genocida sobre el estudiantado. Inmediatamente, la Guardia Genocida realiza un cerco en el sector, y Carlos se ve obligado a dirigirse hasta un predio baldío en el Barrio San Luis. Gracias a su condición física producto de su constante entrenamiento, logra subir un árbol hasta el techo de una vivienda y resiste heroicamente los embates de la Guardia Nacional. No fueron suficientes los BECATs de la Central ni de la Acción Cívica para derribarle, por lo que llaman a la Fuerza Aérea para que arremeta desde el aire contra un único combatiente de una estatura infinita y un valor sobrehumano. Desde su posición, Carlos Arroyo lanza su grito de combate “¡SOY CARLOS ARROYO PINEDA DEL FRENTE SANDINISTA DE LIBERACIÓN NACIONAL! ¡PATRIA LIBRE O MORIR! ¡VIVA SANDINO!”. Es entonces, tras varios intentos, que las alas de la muerte acribillan su humanidad.

La cobardía de la Guardia se hace evidente al ensañarse con el cuerpo del caído. Le tenían miedo a su rostro, a su sombra, a su firmeza, y debían ahogarla en el único lenguaje de violencia que entendían, sin saber que cada tiro multiplicaba por miles el legado que heredaría a las generaciones venideras.

Bajo las ráfagas de la fuerza aérea, fue asesinada también Flor de Liz Robles, inocente estudiante de la Escuela Nacional de Comercio, con solo 18 años. Su familia y la militancia le recuerda con cariño, nostalgia y fortaleza cada año en el monumento que se erigió en la esquina sur del CECNA, a los caídos ese 17 de octubre en el barrio San Luis, del que era originaria. Ese mismo día, es asesinado por la Guardia Nacional Leonardo Juárez Guzmán.

LEGADO Y VIGENCIA DE SU EJEMPLO

Su ejemplo resuena a través del tiempo. En marzo de 1978 se funda una escuela político-militar en la Estanzuela, Estelí, bajo el nombre de Escuela “Carlos Arroyo Pineda”, bajo la responsabilidad militar del Comandante Omar Cabezas. En Junio de 1979, la GPP tenía 3 unidades de combate:  la Unidad “Crescencio Rosales”, la Unidad “Salvador Amador”, y la “Carlos Arroyo Pineda”, bajo la responsabilidad de Francisco Jarquín (Camilo), originario de León, que estaba a nivel urbano en Matagalpa. Así mismo, existe una calle y una Casa Municipal de la Cultura en Matagalpa con su nombre, y durante los años ochenta el Hospital que se encuentra en el Barrio San Luis se llamó Policlínica Oriental Carlos Arroyo Pineda. En la actualidad, la Casa de Cultura de Matagalpa lleva su nombre, al igual que la Unidad de Victoria del Distrito II de Matagalpa y la Unidad de Victoria del Sector 2 de Altamira en Managua.

En julio de 1976, se logra registrar un histórico discurso en el Auditorio Ruiz Ayestas donde denuncia las atrocidades que la dictadura militar somocista hacía sufrir al pueblo nicaragüense, y reivindica las raíces históricas del Frente Sandinista en la lucha por derrocar a toda manifestación del imperialismo en nuestras feraces tierras:

“Pero ese movimiento, ese movimiento del imperialismo y de la dictadura ha llevado paralelo al trayecto de la historia otro movimiento de flujos y reflujos, de victorias y de derrotas, de gestas heroicas, de mucha sangre, porque es muy doloroso el tránsito histórico de nuestro pueblo hacia su definitiva liberación.

Este movimiento paralelo ha sido el movimiento del pueblo, de nuestro pueblo, de los obreros y los campesinos, que han heredado a las generaciones posteriores, y de generación en generación el ejemplo indoblegable de la lucha. Desde los Caciques Diriangén que prefirieron despeñarse antes de entregarse al invasor colonialista, pasando por los Agateyte, pasando por toda la Pléyada de héroes y mártires que alcanzan su más viva expresión con la gesta del General de Hombres Libres Augusto César Sandino. Este movimiento, igualmente contradictorio, igualmente antagónico e irreconciliable con el imperialismo y con la dictadura, este movimiento hoy se expresa en el movimiento de organización político-militar de vanguardia que sintetiza a las más avanzadas ideas de las masas, a los más avanzados combatientes de las masas, a los más firmes y disciplinados y conscientes obreros, campesinos, intelectuales revolucionarios y estudiantes revolucionarios, este movimiento político-militar de vanguardia […], este movimiento que, a la vez, es una revolución propia, aporta al internacionalismo militante y se suma a la marcha irreversible de nuestros pueblos hacia la construcción del socialismo, es el Frente Sandinista de Liberación Nacional […]”

La semilla de su pensamiento y acción ha germinado en los logros que ha alcanzado el pueblo nicaragüense con el Frente Sandinista de Liberación Nacional a la vanguardia, sentando un precedente regional y mundial de avances en la seguridad alimentaria, el acceso a la educación, a la salud y a la vivienda. Nuestra lucha actual es continuación de la suya, vigorizada por su gloriosa sangre, junto a la de Pedro Aráuz, Róger Langrand, Flor de Liz Robles, Martha Angélica Quezada, Juno Genoveva Rodríguez, Israel Lewites, Juan Carlos Herrera y los 50,000 hermanos y hermanas nicaragüenses que ofrendaron su vida para la liberación de nuestra patria.

¡A 48 AÑOS DE SU TRÁNSITO A LA INMORTALIDAD, LA MARCHA HACIA LA VICTORIA NO SE DETIENE!

¡CARLOS ARROYO PINEDA, PRESENTE, PRESENTE, PRESENTE!

¡LUCHAMOS PARA VENCER! ¡NO PASARÁN!

¡POR ESOS MUERTOS, NUESTROS MUERTOS, JURAMOS DEFENDER LAS VICTORIAS!

¡PATRIA LIBRE O MORIR!

Por: Carlos Arroyo Zúñiga, sobrino de Carlos Arroyo Pineda

Fuentes:

1. Arroyo Zúñiga, Carlos. “Carlos Arroyo Pineda “Fermín”: Un canto a la lucha.” Barricada. 17 de octubre de 2022. https://diariobarricada.com/2022/10/17/carlos-arroyo-pineda-fermin-un-canto-a-la-lucha/

2. Arroyo Zúñiga, Carlos. “Seguir el ejemplo de los revolucionarios, como nuestro pueblo continúa el ejemplo de Sandino.” Barricada. 17 de octubre de 2020. https://diariobarricada.com/2020/10/17/seguir-el-ejemplo-de-los-revolucionarios-como-nuestro-pueblo-continua-el-ejemplo-de-sandino/