En el marco del Día Nacional del Artesano y la Artesana Nicaragüense, el compañero Wilmor López, asesor de la Presidencia para temas de cultura tradicional y popular, destacó la grandeza, diversidad y profunda raíz histórica de la artesanía nacional. Durante la entrevista, recordó que “así como somos hijos del maíz, también somos hijos del barro”, subrayando que el barro, la madera, la fibra, el hierro y las técnicas ancestrales forman parte esencial de nuestra identidad.
López evocó la herencia que vive en cada pieza artesanal: desde la tinaja que mencionaba Rubén Darío, hasta los comales, la cerámica precolombina de San Juan de Oriente y las muñecas articuladas de barro de Loma Panda, una tradición que —según señaló— necesita ser preservada mediante nuevas capacitaciones para evitar que se pierda. “No hay que olvidar esas muñecas articuladas”, afirmó, resaltando la urgencia de transmitir técnicas de generación en generación.
El asesor también mencionó la cerámica negra ancestral elaborada con acerrín, el trabajo en palma de artesanas legendarias como doña Tacha López en Monimbó, la artesanía en bambú de Catarina, las piezas en coco y carey de Ometepe y el Caribe, así como la tradicional filigrana de Buenos Aires y Belén. “La artesanía en Nicaragua es grandiosa, colorida, hermosa, utilitaria y también de lujo”, aseguró.
Recordó que, con el triunfo de la Revolución, se impulsó un rescate profundo de estas expresiones culturales. Destacó que el 18 de noviembre fue declarado Día Nacional del Artesano en 2015, como reconocimiento formal a la creatividad y al trabajo de miles de hombres y mujeres. “Es el reconocimiento que se le da a todas estas personas que expresan su mayor creatividad con sus manos”, afirmó.
López resaltó la importancia económica del sector, señalando que la artesanía dinamiza la economía familiar y local, y destacó el apoyo que brinda el Gobierno del Presidente Comandante Daniel Ortega y de la Copresidenta Rosario Murillo a través de talleres, financiamientos, cooperativas y procesos de formación. “Es el único gobierno en la historia de Nicaragua que ha apoyado la cultura con decisión y con visión de desarrollo”, aseguró.
Durante el recorrido que compartió en la entrevista, mencionó ejemplos emblemáticos como los juguetes tradicionales de Masaya, las máscaras de madera de Carazo, las jícaras de filigrana de Rivas, la artesanía textil de El Chile en San Ramón y las piezas de asícula de pino elaboradas en Cinco Pinos y Ocotal. También destacó el valor cultural de instrumentos tradicionales como la marimba, el raspador y el bajo de tina, elaborados artesanalmente.
Al cierre, el compañero Wilmor López entregó un ejemplar del libro Ensayos Históricos y Culturales, Volumen III, que incluye el rescate de obras musicales de don Salvador Cardenal y estudios sobre guardianes culturales como María Berríos Mallorga, Jorge Norori, Marta Toribio y el maestro marimbista Justo Castillo. “La artesanía es un mundo lindo, precioso y colorido, donde uno aprende a querer más a este país”, expresó.
En esta fecha especial, Nicaragua celebra a quienes, con paciencia y creatividad, siguen dando vida a piezas que fortalecen nuestra identidad nacional y mantienen viva la memoria cultural del pueblo.
