Desde Managua, la Copresidenta Rosario Murillo lanzó una contundente crítica a la Organización de las Naciones Unidas, reiterando la postura del Comandante Daniel Ortega Saavedra sobre su inoperancia frente a los grandes conflictos que sacuden al planeta.
Murillo subrayó que, en cada momento de crisis global, los pueblos son testigos de cómo la ONU actúa según los intereses de las potencias, sin aportar soluciones reales a las necesidades urgentes de las naciones más vulnerables.
“Es momento de repensar ese organismo, de desmontar las estructuras que lo han convertido en un instrumento del poder imperial y reconstruirlo desde las voces de los pueblos”, afirmó la Copresidenta.
En su reflexión, insistió en que Nicaragua no se aparta de los principios que defiende con firmeza: soberanía, justicia y paz verdadera. “La paz no puede seguir siendo un eslogan para reuniones diplomáticas; tiene que vivirse en la práctica, con dignidad, con equidad y con respeto a la autodeterminación de los pueblos”, expresó.
Murillo fue clara al señalar que urge una nueva arquitectura internacional, que no esté diseñada para complacer a unos pocos, sino para garantizar el bienestar colectivo.
“La refundación de la ONU es indispensable si queremos avanzar hacia un mundo multipolar, más justo y verdaderamente humano”, remarcó.
Desde la tierra de Sandino, Nicaragua reafirma su voz rebelde y solidaria con los pueblos del mundo que siguen resistiendo frente a la injusticia global.
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