Barricada

Nicolás Maduro: El fascismo está derrotado, la oligarquía está derrotada

En su primer discurso como presidente electo, Nicolás Maduro destacó la legitimidad de su mandato respaldado por el pueblo venezolano, declarando la derrota del «fascismo, la oligarquía y el imperialismo». Afirmó que las elecciones fueron una victoria histórica frente a las presiones extranjeras y prometió garantizar la paz y la soberanía del país.

Triunfo sobre el imperialismo

Destacó que la fuerza bolivariana derrotó al «imperialismo» y a sus intentos de imponer un gobierno alineado con sus intereses.»Este poder no me lo ha dado un Gobierno extranjero, ni un Gobierno ‘gringo’, ni de la oligarquía de los apellidos, del supremacismo, del imperialismo. A mí no me ha colocado como presidente el Gobierno de Estados Unidos. Soy del pueblo, el poder le pertenece al pueblo y al pueblo me debo. Tengo un solo dueño, mi corazón está entregado a la fuerza histórica del pueblo», apuntó.

Añadió «el pueblo le ganó al imperialismo y a su diplomacia del engaño», quienes, a su juicio, no saben «cómo vengarse» por no haber impuesto a un mandatario en el país suramericano. Esta toma de posesión venezolana no la pudieron impedir y es una gran victoria», mencionó.

Además, Maduro aseguró que los gobiernos extranjeros no podrán doblegar al pueblo venezolano. «No es un hombre, es un pueblo. Si Maduro tiene sentido, lo tiene porque es pueblo, porque es Bolívar, porque es Chávez. Ellos pretendieron convertir la elección de un país en una elección mundial. ¡El fascismo está derrotado, la oligarquía está derrotada!».

Venezuela en Paz

Afirmó que nunca antes había presenciado una conspiración de tal magnitud contra Venezuela: «siempre adornada con la diplomacia del engaño, la de la zanahoria o la del garrote». Por ello, advirtió que los venezolanos tienen la «diplomacia bolivariana de paz» para «hacer respetar la paz». «Aquellos que nos subestimaron han cometido un gran error en política y geopolítica», señaló Maduro.

Maduro destacó: «Somos guerreros de la historia, con la misión de asegurar la paz y la soberanía nacional. Este es un momento lleno de emociones y marcado por el recuerdo de tantas luchas».

Maduro dijo que «a los cobardes no los respetan a nadie. Los patean, los humillan y los destruyen. Quien se somete al imperio y se convierte en su esclavo, es como quien hace un pacto con el diablo: lo escupen, lo queman, lo usan y luego lo desechan», citando como ejemplos a Canadá y Panamá.

«Es crucial saber dónde estamos parados. Si estamos aquí, es porque el Estado venezolano, ejerciendo su derecho a la legítima defensa, enfrentó una conspiración mundial, pública, evidente y comunicacional, liderada por los Estados Unidos y sus aliados en América Latina y el mundo Convirtieron la elección presidencial de Venezuela en una elección mundial, ¡y la ganamos!. La fuerza bolivariana la que «le ganó al imperialismo y a su diplomacia de engaño. No pudieron con nosotros, ni ustedes ni nadie va a poder con este pueblo”, reafirmó.

Al finalizar, el presidente venezolano expresó: «Yo, Nicolás Maduro Moros, soy David, hijo del pueblo de Venezuela, y voy con Dios hoy y siempre en batalla permanente, con Chávez y Bolívar en victoria permanente. He jurado ser el presidente de Venezuela y lo cumpliré junto al pueblo, siempre junto al pueblo».