En conmemoración del 45 aniversario del Ministerio del Interior (MININT), la Subcomisionada Jacqueline Huete, Directora del Centro Penitenciario Integral de Mujeres, y el Comisionado José Luis Gómez, Inspector General del Sistema Penitenciario Nacional, destacaron en una entrevista en el programa Informe Pastran de Canal 6 el compromiso humanitario del Sistema Penitenciario Nacional de Nicaragua.
La Subcomisionada Huete resaltó los avances en el Centro Penitenciario de Mujeres, mencionando la creación de una Casa Materna con todas las condiciones necesarias para atender a las mujeres privadas de libertad. También destacó la integración de estas mujeres en diversos planes educativos, que incluyen desde alfabetización hasta educación universitaria, brindando oportunidades para su rehabilitación y reinserción en la sociedad. En cuanto a la atención en salud, se proporciona un servicio especializado, lo que permite un trato digno y humano a las internas.
«Implementamos programas como Educa a tu Hijo y Acércate Más, que fortalecen los lazos familiares. Las capacitaciones y cursos que ofrecemos son herramientas vitales para su reinserción social, permitiéndoles regresar a la sociedad como personas transformadas y capaces de sostener a sus familias dignamente», afirmó Huete.
Entre las actividades que se desarrollan con las mujeres privadas de libertad, la Subcomisionada subrayó los talleres de manualidades, costura, artesanías y cursos de electricidad, como parte del proceso de capacitación y preparación para la vida fuera del penal.
Huete también mencionó el sistema automatizado de visitas familiares, que permite una interacción regular entre las internas y sus seres queridos. «En ocasiones especiales como cumpleaños, ofrecemos espacios para que celebren con sus hijos y familiares, fortaleciendo así los vínculos afectivos», agregó.
Por su parte, el Comisionado José Luis Gómez subrayó que el Sistema Penitenciario Nacional, fundado en 1979, se distingue por su organización y respeto a los derechos humanos. «Los centros penitenciarios no son solo lugares de reclusión, sino espacios de oportunidades donde los privados de libertad acceden a educación, deportes, cultura, e incluso se integran en actividades productivas».
El Comisionado detalló los programas educativos disponibles, que incluyen desde alfabetización hasta estudios universitarios en coordinación con diversas universidades del país. Asimismo, destacó las actividades productivas que se desarrollan en los centros penitenciarios, tales como carpintería, soldadura, panadería y elaboración de placas para vehículos. En el penal de Estelí, por ejemplo, existe una fábrica de puros que no solo contribuye a la reintegración de los reclusos, sino que también genera ingresos para sus familias.
Gómez reafirmó el objetivo del sistema penitenciario: «No se trata solo de cumplir una pena, sino de preparar a los privados de libertad para su reintegración en la sociedad, respetando siempre sus derechos y ofreciéndoles herramientas para construir un futuro mejor».