Barricada

24 de junio, El Chaparral

Sin El Chaparral, en consecuencia, no hubiera habido Revolución Popular Sandinista o hubiese tomado un rumbo diferente, menos ideológico, menos orgánico, menos unitario. Sin estas experiencias, el comandante Carlos Fonseca jamás se hubiera dedicado tan anticipadamente a “trabajar con los cinco sentidos” para encontrar “las verdaderas causas de todo”.

Aldo Díaz Lacayo

En la historia de la lucha sandinista, un hito importante es la guerrilla de El Chaparral, alzamiento armado que se realizó en junio de 1959. 

Recién había triunfado la revolución cubana que derrotó a la dictadura de Fulgencio Batista.  Los jóvenes barbudos de la Sierra Maestra demostraron que los ejércitos organizados y entrenados por el imperialismo se podían derrotar. El Comandante Fidel Castro, al frente el Ejército Rebelde habían entrado triunfantes a Santiago de Cuba el 1 de enero de 1959. 

Columna Rigoberto López Pérez

El entusiasmo de la juventud revolucionaria nicaragüense encontró eco en el comandante Ernesto Guevara, el Che, quien apoyó la formación de la columna Rigoberto López Pérez, integrada por 75 combatientes, que desde territorio hondureño invadieron Nicaragua con el objetivo de derrocar a la dictadura somocista y su brazo armado, la criminal Guardia Nacional.  Al frente de la columna fue designado Rafael Somarriba, exmilitar nicaragüense.

Entre los jóvenes revolucionarios estaba el joven Aldo Díaz Lacayo, que vino desde México, y el estudiante Carlos Fonseca Amador, que se incorporó el 21 de junio.    

Carlos, se presentó como voluntario, y se quedó en la guerrilla a pesar de que se le objetó que no había entrenado como los demás y que era muy corto de vista. Carlos respondió: soy estudiante, soy revolucionario y puedo aguantar. Le entregaron uniforme, mochila y un fusil Garand. 

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24 de junio, combate en El Chaparral

Llegó el día del combate: el 24 de junio a las 12.45 de la tarde, la columna fue atacada por la retaguardia por el ejército hondureño.  En el fragor de la lucha, el joven estudiante Carlos Fonseca Amador, se puso de pie y gritó: “¡Viva la revolución nicaragüense! ¡Viva Sandino” y cayó al suelo herido, con la sangre saliendo a borbollones de su pecho.

Le habían atravesado un pulmón.  Después de días de agonía, Carlos Fonseca se pudo recuperar, para volver a la lucha guerrillera en los siguientes años. 

En Chaparral, departamento de El Paraíso, Honduras, las tropas hondureñas se ubicaron en las alturas cercanas al campamento guerrillero y los atacaron por sorpresa.   El combate duró unas dos horas y media, al final los militares asesinaron a los combatientes que ya se habían rendido.  La columna Rigoberto López Pérez sufrió 24 bajas, 9 muertos y 15 heridos.

Cayeron heroicamente: Antonio Barbosa, Manuel José Aróstegui, Manuel Baldizón Richardson, Enrique Morales Palacios, Miguel Ángel Canelo, Adán Suárez López, Aníbal Sánchez Aráuz, Onelio Hernández, Marcelo Fernández. Los heridos fueron llevados a El Paraisito, luego a Danlí y posteriormente a La Habana, Cuba. La mayoría de los guerrilleros fueron detenidos.

La masacre de El Chaparral conmovió a los estudiantes que organizaron una marcha en la ciudad de León el 23 de julio de 1959, la que fue reprimida violentamente por la Guardia Nacional con un saldo trágico de cuatro muertos (José Rubí, Mauricio Martínez, Sergio Saldaña y Erick Ramírez) y 43 heridos.

Reflexiones de Carlos Fonseca, sobre la experiencia de El Chaparral

“Si deseamos superar las causas que produjeron ‘El Chaparral’, es preciso que trabajemos con los cinco sentidos y estar conscientes de que esta lucha tiene que ser larga y dura y que el triunfo no se ha de producir en 24 horas.

Nosotros los jóvenes somos los que tenemos la obligación de llevar adelante la lucha. Ya hay razones para confiar en que sabremos responder. Voy a decirle algo más sobre ‘El Chaparral’. Una serie de condiciones me parece que volvieron inevitable la preparación de esa columna, es decir que el conjunto de hechos incluyendo el del propio lugar de la tragedia es muy remoto que hubiera sido posible evitarlos.

Soy opuesto a creer que todo fue negro en ‘El Chaparral’. Creo que tuvo de positivo haber suministrado experiencia a nuestra lucha. Los chinos afirman que el fracaso es la madre del éxito. Y si esto es cierto no podía triunfarse en ‘El Chaparral’ ya que apenas estaba iniciándose el movimiento y por consiguiente no se había fracasado anteriormente”.

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Victoria moral en El Chaparral

El Chaparral fue el último intento de hacer una revolución utilizando la estrategia de la invasión, al quedar demostrado que no era el camino.  La reflexión crítica y autocrítica sobre las causas del revés en El Chaparral, enseñó que debía haber más rigor en la calidad del reclutamiento de combatientes y que era necesario dar un salto cualitativo.  Se fundó el Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN) en 1961 y en agosto de 1967 se continuó la lucha, organizando los focos guerrilleros en Pancasán. Vinieron luego los años de lucha, bajo las banderas de Sandino hasta la victoria del 19 de Julio de 1979.