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Operación “Reptil”: El ajusticiamiento de Somoza Debayle por el Comando del PRT-ERP

Escrito por : Carlos Arroyo 17 de septiembre de 2025

Tras 20 años de lucha insobornable, el vigoroso avance del Frente Sandinista de Liberación Nacional y la gallardíaimbatible del pueblo nicaragüense obligaron al dictador Somoza Debayle a huir de Nicaragua en la madrugada del 17 de julio de 1979, acompañado solamente de un minúsculo número de sus lacayos. Un helicóptero Sikorski le recogió en la Loma de Tiscapa, escapando despavorido con destino a Miami.

En las radios de Nicaragua resonaba el jubiloso comunicado en la viva voz de la Compañera Rosario Murillo: “Hermanos nicaragüenses, ¡el somocismo se fue! ¡Somoza está por irse en cualquier momento! La Guardia, institución más tenebrosa de este gobierno genocida, está completamente derrotada. El triunfo es del glorioso pueblo nicaragüense. El triunfo es del Frente Sandinista de Liberación Nacional. El triunfo es del Gobierno de Reconstrucción Nacional. ¡Patria Libre o Morir! La sangre generosa de nuestros hermanos caídos y el heroísmo sin límite de nuestro pueblo, nuestros héroes y mártires, vivirán en la nueva Nicaragua. Viva Nicaragua Libre, Viva el Frente Sandinista de Liberación Nacional, Viva el Gobierno de Reconstrucción Nacional, Viva el Pueblo de Nicaragua.”

El 19 de julio se proclamó la victoria de la Revolución Popular Sandinista, y el 20 de julio las calles se desbordaban con la algarabía de saberse verdaderamente libres después de cuatro décadas de terror y sufrimiento, de resistencia y anhelo por alcanzar el sol de la libertad. La icónica foto de un guerrillero sandinista pateando el cuadro del dictador Somoza Debayle, graficaba la victoria definitiva del pueblo nicaragüense que daba al traste con el oprobio de la tiranía. En los rostros de las multitudes se mezclaba la felicidad y la melancolía de haber materializado el sueño por el que se sacrificaron más de 50,000 hermanos y hermanas, compatriotas, héroes y mártires que nutrieron el camino a la victoria con su gloriosa sangre.

En su derrota, el último soldado de la marinería norteamericana en Nicaragua fue abandonado a su suerte: el entonces presidente estadounidense Jimmy Carter le negó el asilo en Miami. Tuvo que deambular por el Mar Caribe, permaneciendo por dos semanas en Bahamas. En una llamada desesperada, rogó asilo a su contraparte en Paraguay. El nefasto dictador paraguayo Alfredo Stroessner aceptó brindársela. Era una respuesta natural, al ser ambos de la misma calaña, piezas del Plan Cóndor. A mediados de agosto de 1979, partió de Bahamas a Guatemala, donde hizo escala con dirección a Asunción, Paraguay.

La inmediata amenaza contrarrevolucionaria

El derrocamiento del somocismo no significaba su descarte totalcomo figurilla útil a los intereses yanquis. El ala más reaccionaria de la política estadounidense y sus órganos de inteligencia comenzaban a preparar el plan para reinstalar al somocismo como gobierno títere mediante una contrarrevolución armada. Los guardias que habían huido y seguían siendo fieles a Somoza serían financiados y entrenados por la CIA de la mano de sus aliados sionistas israelíes para conformar la Contra en la frontera hondureña.

Por otro lado, el triunfo de la Revolución Iraní también en 1979, la toma de la embajada estadounidense en Teherán dondeagentes de la CIA fueron hechos rehenes por los revolucionarios, y la incapacidad de Carter de solucionar dicha crisis antes de las elecciones presidenciales donde pensaba reelegirse, serían factores que debilitarían la imagen de su gobierno ante los votantes. Los Republicanos, saboreando la posibilidad de volver a la presidencia con Ronald Reagan como candidato, estaban prestos a aplicar el manual de contrainsurgencia para intentar derrocar al recién instalado Gobierno de Reconstrucción Nacional en Nicaragua.

El Comando del Ejército Revolucionario del Pueblo

El triunfo de la Revolución Popular Sandinista se logró gracias al accionar conjunto del pueblo y la guerrilla a través de susFrentes Guerrilleros. Entre 1977-1979, se establecieron el Frente Norte Carlos Fonseca Amador, Frente Sur Benjamín Zeledón, Frente Interno Camilo Ortega Saavedra, Frente Occidental Rigoberto López Pérez, Frente Nororiental Pablo Úbeda, Frente Oriental Roberto Huembes, y Frente Suroriental Ulises Tapia Roa. Unos avanzando y haciendo retroceder a la guardia en la ciudad, otros dividiendo las fuerzas genocidas en la montaña y liberando comunidad por comunidad, y todos abriéndose camino mutuamente para alcanzar el objetivo final: el búnker de Somoza en Managua.

En el caso particular del Frente Sur Benjamín Zeledón, participaron una gran cantidad de internacionalistas de diversos países, solidarios con la causa sandinista a la que veían como un urgente bastión de resistencia antiimperialista en el ombligo dela América continental. El pensamiento de Sandino fundido con el de Martí, Bolívar y otros tantos íconos de las luchas nuestramericanas, se materializaba en los golpes que asestaba el sandinismo a la dictadura somocista, y que resonaban a nivel global, desde la toma de la Casa de Chema Castillo, hasta el Asalto al Palacio Nacional, entre las victorias del pueblo marchando a su definitiva liberación. La Revolución Popular Sandinista se había vuelto una inspiración y una esperanza para miles de revolucionarios de todas las nacionalidades.

Entre estos valientes y solidarios combatientes que conformaban la Brigada Internacional “Gaspar García Laviana”, se encontraban miembros del Ejército Revolucionario del Puebloprocedentes de Argentina. La experiencia de las contrainsurgencias en América del Sur aplicadas por las dictaduras al amparo del Plan Cóndor e información recogida por la inteligencia, hacían evidente que Somoza Debayle encabezaría una inminente contrarrevolución armada auspiciada por el imperio yanqui y, por tanto, su existencia representaba un potencial peligro para la estabilidad de la naciente Revolución Popular Sandinista. Con el objetivo estratégico de evitar esta amenaza y cortar la cabeza misma del movimiento contrarrevolucionario, se organizó un comando de guerrilleros argentinos del ERP para ajusticiar al tirano.

Los preparativos para la Operación “Reptil”

Según relata el compañero peruano Eloy Villacrez, combatiente de la Brigada Internacional “Gaspar García Laviana”, se designó la ciudad de Lima, Perú, como Centro de Operaciones del Comando de planteamiento y del entrenamiento. Se tomó esta decisión por ser Perú un país sin fronteras con Paraguay. Como centro de entrenamiento se usó un área despoblada cerca de Pozo Santo, Ica, al suroeste del Perú.

El jefe de la operación, Enrique Gorriarán Merlo “Ramón”, la bautizó con el nombre clave de Operación “Reptil”. Se escogióuna pareja de militantes del ERP que no habían combatido en Nicaragua para funcionar como “ojos y oídos” en Asunción, y dar seguimiento a Somoza. Otros dos equipos establecieron rutas de entrada y salida hacia Argentina y Bolivia, a cargo de Anselmo Flores, Montonero Argentino.

Enrique Gorriarán “Ramón” refiere que estuvo cuatro meses y medio antes, y que Hugo Irurzún “El Capitán Santiago” llegó seis meses antes de septiembre de 1980. Gorriarán afirma que participaron en el operativo 4 hombres y 3 mujeres, entre ellos Roberto Sánchez Nadal “Armando” y Claudia Lareu, pero que en total eran 10 compañeros los involucrados. Bajo el pretexto de encontrar una peluquería a una cuadra de donde vivía “un tal Anastasio Somoza de Bayle”, una de las compañeras logró localizar la casa de Somoza. Se procedió a alquilar un sitio que permitiera vigilarlo 24 horas, a cuatro cuadras del objetivo.

En un taller de Lima ubicado en Avenida Materiales-Callao, se acondicionaron dos vehículos con fusiles AKM, explosivos y lanzagranadas. Luego, fueron conducidos por dos parejas de “novios” hasta Asunción, donde se les unieron tres combatientes que llegaron por servicio público. Las “novias” salieron de Asunción y permanecieron en la frontera argentina a la espera de los acontecimientos.

Con la información precisa que hizo llegar el equipo de vigilancia, los “ojos y oídos”, se sabía que la inteligencia estadounidense mantenía una vigilancia y seguridad muy estrecha, de 60 agentes permanentes de seguridad, tres turnos las 24 horas del día. Por esa razón y la seguridad que resguardaba Somoza, las comunicaciones entre los miembros guerrilleros de Paraguay, Bolivia y Argentina hacia Lima y viceversa se entregaban personalmente, mano a mano, con mensajeros de la más alta confianza. Se identificó un kiosco de venta de periódicos a dos cuadras de donde vivía Somoza Debayle, y se logró instalar un compañero permanente en este punto de vigía.

El ajusticiamiento del tirano

Cuando se tuvo la convicción absoluta de que cada miembro del comando tenía claro su papel en la misión y se encontraba preparado, se decidió ejecutar la Operación “Reptil”. Santiago permaneció los dos días previos en la parte delantera de la casa, con el RPG-2 y la ametralladora lista. Armando calentaba cada hora el motor de la camioneta con la que interceptaría la caravana de Somoza y no se despegaba el FAL, la pistola y la subametralladora. Ramón, mientras tanto, se mantenía pegado al walkie-talkie esperando la llamada del vigía.

Se conocía que los miembros de protección de la CIA y la Seguridad Paraguaya, en número de 30 agentes por turno, (4 vehículos y motocicletas) escoltaban permanentemente a Somoza en sus desplazamientos, quien en ocasiones se movilizaba en un vehículo azul y otras veces en uno blanco. El 17 de septiembre, el vigía permanente que habían instalado en el kiosco comunicó la anhelada clave: “blanco, blanco”. A las diez de la mañana, el vehículo que llevaba a Somoza, un Mercedes Benz blanco no blindado, salió de su residencia e inició su recorrido sobre la avenida España (avenida “Generalísimo Franco”, durante la dictadura de Stroessner), con dirección hacia un banco situado en el centro de la ciudad. Usualmente, su conductor era el torturador Samuel Genie, ex general y ex jefe de la infame Oficina de Seguridad Nacional. No obstante, ese día iba manejando su chofer César Gallardo.

La caravana de Somoza Debayle se detuvo un momento en los semáforos a escasos 60 metros de la casa donde operaba el Comando Guerrillero. “Armando” dejó pasar dos o tres vehículos de los guardaespaldas y le echó la camioneta a la Volkswagen Combi que venía delante de la limusina de Somoza, deteniendo el tráfico. El chofer César Gallardo frenó de golpe y “el Capitán Santiago” hizo un primer intento de disparar el lanzagranadas, pero la granada no funcionó. Al ver a “Santiago” tendido en el suelo cambiando el proyectil, “Ramón” empezó a disparar con una M-16 contra el vehículo de Somoza. En el acto, pudo notar que los disparos penetraban sin mayor problema, impactando el cuerpo del tirano.

“Ramón” se quedó sin municiones y junto a “Armando”, sacaron más armas de la casa para abatir a la seguridad de Somoza Debayle. El rugir del FAL en las manos de “Armando” hizo retroceder a los escoltas, quienes se cubrían de los ladrillos que se desprendían de las paredes azotadas por el fuego guerrillero, lo que permitió a “Ramón” sacar la ametralladora de la casa. Para entonces, “El Capitán Santiago” había logrado cambiar el proyectil e hizo el disparo mortal. La granada dio en el centro del vehículo: de Somoza solo quedó el execrablerecuerdo junto a un reloj de lujo y algunas joyas, y estuvo claro que la misión estaba cumplida. Irurzún le preguntó a Gorriarán, “¿Le pegué?”. Gorriarán le respondió, “Lo destrozaste”. El tirano había sido ajusticiado.

El plan de retirada

Los combatientes no perdieron tiempo en montar a su camioneta y buscar las rutas establecidas para la retirada. La camioneta se encontraba bastante dañada por el tiroteo, y a corta distancia se averió para no arrancar más. Se vieron obligados a tomar un vehículo para continuar la retirada. Los miembros del comando debían llegar a la frontera fluvial argentina, donde les esperaba el equipo de retirada con dos camionetas con placas peruanas prestas para realizar el viaje de Argentina a Bolivia y al Perú.

Claudia Lareu, cruzó la frontera con Brasil y desde un punto de seguridad avisó a Enrique que había condiciones para que también pasara. Roberto Sánchez y la compañera que viajó con él a Paraguay desde Nicaragua, cruzaron sin problemas en un vehículo con placa de Brasil. Irurzún recogió al compañero del kiosco y lo condujo al punto fronterizo Itá Enramada, un cruce de río al sur de la ciudad de Asunción y colindante con Argentina. El compañero del kiosco pudo tomar la última balsa antes que todos los puestos fronterizos fueran cerrados. Al plantearse la necesidad de un compañero que quitara presión y garantizara al resto del comando cumplir con el plan de retirada, Irurzún se ofreció sin dudarlo, plenamente consciente que, al quedarse en Asunción, sellaba su destino.

Hugo Irurzún “El Capitán Santiago”Más que un sacrificio, un deber cumplido.

En la capital paraguaya, la reacción fue brutal. La seguridad de Stroessner mandó a cerrar todas las fronteras y a reprimir con saña a todo el que pudiese vincularse con la acción guerrillera, realizando una tarea de cruel rastrillaje por todos los alrededores. El ministro del Interior ofreció entre 5 y 7 millones de guaraníes (aproximadamente 50 mil dólares de la época) por los miembros del comando, sin siquiera conocerles el rostro.

El 18 de septiembre, las fuerzas represivas de Stroessner presentaron el cuerpo de Hugo Irurzún “El Capitán Santiago”. Las marcas en su cuerpo evidenciaban que había sido cruelmente torturado y asesinado, no sin antes darles dura batalla desde la casa de seguridad donde fue detectado. Su heroica inmolación se abrazaba con la bravura del poeta y héroe nacional de Nicaragua Rigoberto López Pérez, quien en septiembre de 1956 ajusticiara a Somoza García, padre de Somoza Debayle. El tránsito a la inmortalidad de Irurzún fue,más que un sacrificio, un deber cumplido. El pueblo de Nicaragua y América Latina le estará eternamente agradecido.

Este 17 de septiembre rendimos homenaje a ese valiente Comando de internacionalistas que arriesgaron su vida para ajusticiar al último soldado de la marinería estadounidense en Nicaragua. Solo la hermandad entre los pueblos garantizará la construcción de la Patria Grande. Seguimos enarbolando las palabras del Comandante Tomás Borge Martínez, cuando tras el triunfo de la Revolución Popular Sandinista, exclamó: “La Solidaridad es la Ternura de los Pueblos”. Desde la Nicaragua Bendita y Siempre Libre del General Augusto C. Sandino, con el Frente Sandinista de Liberación Nacional y el liderazgo de los Copresidentes Comandante Daniel Ortega Saavedra y Compañera Rosario Murillo Zambrana, continuamos trabajando arduamente para garantizar un presente y un futuro digno y soberano para todos los nicaragüenses, para todos los latinoamericanos, para toda la humanidad.

¡Honor y Gloria al Comando Guerrillero del PRT-ERP!

La Consigna sigue vigente: ¡Muerte al Somocismo!

Con la Paz, No se Juega

No pudieron, Ni Podrán

Patria Libre o Morir

Patria o Muerte, Venceremos

Fuentes:

1. Declaraciones de Enrique Gorriarán Merlo. El País, 11 de agosto, 1983. https://elpais.com/diario/1983/08/12/internacional/429487208_850215.html

2. Juventud Presidente. Día de la Alegría: Nicaragua celebra 45 años de la huida del dictador Somoza. https://jpmas.com.ni/dia-de-la-alegria-nicaragua-celebra-45-anos-de-la-huida-del-dictador-somoza/

3. Nicaragua. Memoria de una acción de justicia: ¡Muerte a Somoza y al somocismo! https://www.resumenlatinoamericano.org/2020/09/18/nicaragua-memoria-de-una-accion-de-justicia-muerte-a-somoza-y-al-somocismo/

4. Resumen Latinoamericano. Nicaragua. El 17 de septiembre de 1980 era ajusticiado en Paraguay el genocida Anastasio Somoza Debayle / Cómo fue el operativo. https://www.resumenlatinoamericano.org/2023/09/17/nicaragua-el-17-de-septiembre-de-1980-era-ajusticiado-en-paraguay-el-genocida-anastasio-somoza-debayle-como-fue-el-operativo/

5. Un operativo histórico: cuando un comando guerrillero argentino ajustició a Somoza. https://www.diariobarricada.com/2022/09/17/un-operativo-historico-cuando-un-comando-guerrillero-argentino-ajusticio-a-somoza/